17 febrero 2013

Bora Bora

Esta semana llegaba a las tiendas lo más nuevo de Stefan Feld: Bora Bora. Aunque tengo aún bastantes juegos por estrenar el amigo Feld se merece un pequeño enchufe y se ha saltado la cola como un campeón.

Hacía tiempo que no compraba un juego sin antes haber mirado reviews o haberme leído las reglas, pero Stefan es uno de los pocos autores con los que aún me permito hacerlo. Es una sensación totalmente diferente la de abrir un juego y no saber que te encontrarás dentro y hacia tiempo que no la tenía.

La caja viene cargada y su peso sorprende. La caja es la de alea de toda la vida como el Die Burgund, o el Notre Dame pero pesa mucho más. El motivo del peso no es otro que la excelente calidad del cartón, las losetas son gruesas de verdad y además trae bastante madera. Ojalá las losetas del Die Burgund fueran así, todos los componentes son excelentes pero si nos ponemos exigentes los sacerdotes podrían ser al estilo Ora et Labora y el papel del manual un poco más grueso, en serio al leer la página apenas se mantiene firme...

Las reglas intimidan bastante, no son muchas páginas pero van condensadas y hay muchos conceptos que digerir. A diferencia de otros juegos de Feld los mecanismos parecen estar mucho más conectados que por ejemplo en Trajan. A continuación voy  a resumir un poco por encima las reglas, antes de jugar haced una buena leída ya que es muy fácil pasar por alto detalles y no voy a entrar en profundidad.

En este juego nos ponemos en el papel de una tribu que habita en las islas de Bora Bora, y nuestro objetivo es convertirnos en la tribu más influyente a base de expandirnos hacer gala de nuestros guerreros tatuados, las joyas fabricadas por las mujeres y nuestra buena relación con los dioses.

En el tablero principal hay una serie de islas divididas en 4 tipos de terreno y con unos caminos para conectar las zonas indicando la dificultad de exploración. Cada jugador dispone de un tablero donde hay un jeroglífico resumen de las reglas, 12 casillas con unas cabañas que se irán colocando en el tablero central. En cada hueco de nuestro tablero podremos colocar un hombre o una mujer como representante de las habilidades de la aldea que hemos fundado al colocarla en el tablero.

La mecánica principal del juego es una selección de acciones con dados algo parecida a Die Burgund pero con unos matices muy interesantes. En este caso cada jugador tirará 3 dados y por orden de turno colocará un dado en una de las acciones disponibles.

El toque interesante consiste en que si ya hay un dado en esa acción deberemos colocar uno que tenga un valor menor pero a menudo cuanto más alto sea el valor mejor será la acción realizada de modo que hay una interesante disputa por las acciones. Jugar un 6 en una nos va a dar un muy buen resultado pero quedará abierta la acción para los demás jugadores (aunque habremos eliminado la posibilidad de colocar un 6).

Como veis un 1 puede ser demoledor para los oponentes cerrando una acción (aunque los dioses tienen algo que decir al respeto). Las acciones disponibles son:

  • Expandir(Tierra o Mar): Colocamos una de las chozas de nuestro tablero en una de las regiones del mapa adyacente a una de nuestras aldeas. Para ello el dado usado deberá tener un valor igual o mayor al del camino para hacerlo. Con esta acción a parte de obtener el recurso que genera la zona (madera, arena, piedra o ofrenda) haremos espacio en nuestro tablero para colocar un hombre o mujer.
  • Mujer: En el tablero central hay distintas trabajadoras colocadas del 1 al 6 con distintas habilidades, normalmente relacionadas con las acciones que se describen aquí. El valor del dado nos permite escoger una entre todas las de valor igual o inferior y colocarla en uno de los huecos de nuestro tablero.
  • Hombre: Idéntico al de mujer pero con una hilera de hombres.
  • Templo: Cada jugador dispone de 4 sacerdotes con esta acción podemos colocar uno de ellos en el templo que tiene una hilera del 6 al 1. Lo podremos colocar en una posición menor o igual al valor del dado desplazando los sacerdotes en cadena. Cada sacerdote en el templo nos dará puntos al final de la ronda y obtenemos un bonus de fuego que explicaré más adelante
  • Ayudante: Una especie de comodín que nos permite comprar recursos, ofrendas, cartas de dios, puntos de victoria, tatuar guerreros o conseguir conchas.
  • Construir: En cada tablero hay una cuadricula de 4x3 con distintos recursos pintados si tenemos dos materiales juntos ya sea vertical u horizontalmente podemos construir en esas casillas uno de nuestros edificios numerados del 1 al 6 que tenga un valor menor  o igual al del dado obteniendo puntos de victoria (10/7/4 en función de la ronda). Construir da un bonus de fuego.
Una vez todos los jugadores hayan colocado se pasa a la segunda fase en que cada jugador puede usar un hombre y una mujer. Esto permitirá a los jugadores hacer acciones extra, conseguir puntos etc. Hay que destacar que acumular hombres o mujeres no nos dará más acciones pero si más donde escoger, además los trabajadores iguales se pueden sumar de modo que si tenemos dos hombres que dan 2 puntos de victoria se agrupan y nuestro "hombre" nos dará 4 puntos.

Finalmente en la tercera fase se puntúan los tatuajes conseguidos por cada facción cambiando el orden de juego siendo el primero el que ha conseguido más a menos. Puntos por cada sacerdote en el templo, con las conchas conseguidas por las mujeres se puede comprar una de las joyas de la ronda y finalmente se puede cumplir uno de los objetivos en nuestro tablero y adquirir uno de nuevo.

Después de 6 rondas se da la oportunidad de completar los 3 objetivos que tenemos en el tablero se dan puntos por varios logros y el jugador con más puntos será el vencedor.

Faltaría mencionar el tema de los dioses. Podemos conseguirlos con la acción del ayudante o con el bonus del fuego (nos da a escoger entre una carta de dios o una ofrenda y un tatuaje o una concha) y nos permiten romper reglas de varias maneras: colocar un dado aunque sea mayor, que un dado cuente como un 6 una vez puesto, activar otro hombre o mujer entre otros.

A grosso modo esto es Bora Bora aunque no hace falta que os diga que hay mil pequeños detalles que tener en cuenta, las tareas pueden ser cosas como tener un poblado en 3 zonas de bosque, tener 3 maderas en nuestros recursos, etc. Los trabajadores disponibles, los dioses, todo se convierte como no en un impresionante rompecabezas con múltiples soluciones en dónde no parece haber nada que falle.

Creo que es inevitable compararlo con el Die Burgund ya que hay multitud de detalles que me lo recuerdan. De hecho al acabar la partida al Bora Bora a parte de volver a jugar otra me han venido unas ganas tremendas de jugar un Die Burgund. Aún me faltan partidas para poder valorarlo bien pero parece que Bora Bora tenga más libertad en cuanto a las estrategias a seguir.

Esta semana lo tiraré a los leones de mi grupo de juego a ver cómo va la cosa, pero como primera impresión me parece una excelente incorporación!

Si queréis podéis leer la traducción de las reglas cortesía de LexLudiMalacitana.

Nos vemos!

4 comentarios:

  1. Ayer lo jugaron en la asociación (yo me lo perdí, por desgracia) y terminaron los 4 encantados. Con la cabeza un poco frita, pero les gusto mucho a todos.

    A mí me toca probarlo el miércoles, así que diré algo.

    Un saludo!

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  2. Necesito jugar a un juego de Feld. Cada vez hablais mejor de sus juegos y yo solo he podido catar el Roma...

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  3. Para mi también ha sido una gran incorporación que ha hecho olvidarme de otras juegos que tenía pensado probar.

    Espero que cuaje bien en tu grupo de juego ;). Ya contarás...

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